La obra El huevo y la gallina, cuento de la ucraniana Clarice Lispector, llega al Centro Cultural Helénico, un monólogo que no busca satisfacer a la razón o al entendimiento, sino conmover y transformar.
El cuento que la autora ucraniana-brasileña leyera en un congreso mundial de brujería en 1975 en Colombia, trata sobre una fallida clase de cocina televisada de una mujer de otro tiempo.
Ella es un personaje pulido y carismático que podría evocar a la célebre estadunidense Julia Child o a la célebre mexicana Chepina Peralta, y también es una académica dando cátedra en… ¿Harvard?, así como una mujer que se encarga de su hogar y que puede hablar de la condición femenina, de la maternidad y de la cocina sin malabarear siquiera.
Clarice Lispector, una autora con un pensamiento mutante y poético que, en El huevo y la gallina, trasluce una de sus obras de mayor altura, oscilante entre el desamparo y desespero, la euforia y la furia; una mixtura escénica que la actriz Alaciel Molas interpreta con gran virtud y desenfado.
La mujer en escena mueve la cabeza de un lado a otro como una gallina buscando algo: busca el huevo, ama el huevo. Habla a sus amigas, a esas mujeres que se sienten menos solas al verla y al intentar seguir sus recetas; del otro lado habla a sus estudiantes y les imparte saberes que ponen (quizás) en riesgo no sólo sus trabajos, sino su vida misma.
Se sobrentiende que siempre hay un intermediario, una cámara, una pantalla, una institución, una autoridad. Es imposible quizás la libertad. Ella lo sabe. Ella quiere hablar. Pero ella está cansada… tan cansada. Es esta obra, ¿una despedida, un último día, una confesión, una iluminación?
El equipo creativo está conformado por Alaciel Molas, quien, desde el respeto y amor profundo por Clarice Lispector, da todo de sí para el personaje; la música original en vivo es de Mariana Chávez-Lara y Luz Varela, quienes construyen atmósferas precisas brindando humor a la pieza.
La iluminación y diseño de escenografía son de Alejandra Escobedo, se sitúan en la época y en un universo liminal que puede sobreponer distintos discursos simultáneos (como sucede en el texto mismo).
La traducción de Juan Manuel Torreblanca buscó la mayor fidelidad posible al original en portugués y en el trabajo de dirección que realizó con Jonathan Silva, buscaron traducir la profundidad íntima del cuento a acciones escénicas que lo complementaran y contribuyeran a una lectura potente.
No hay una anécdota lineal, no hay un argumento que siga la lógica de la dramaturgia, lo que hay es un chispazo creativo, que cautivará al público amante de la literatura y la poesía.
El huevo y la gallina tendrá temporada del 7 al 29 de febrero, los miércoles y jueves a las 20:00 horas en el Foro La Gruta. El costo del boleto es de $250. Las localidades pueden adquirirse en la taquilla del Centro Cultural Helénico, ubicado en avenida Revolución 1500, así como en la página https://helenico.gob.mx/.
Clarice Lispector, perteneciente a la tercera fase del modernismo
Nacida en Ucrania el 10 de diciembre de 1920, llegó a Brasil antes de los 3 años de edad. Es considerada una de las escritoras brasileñas más importantes del siglo XX. Perteneció a la tercera fase del modernismo, la de la generación brasileña del 45’.
A los 21 años publicó Cerca del corazón salvaje, obra que había escrito a los 19 años y recibió el premio Graça Aranha a la mejor novela. En 1946 publicó su segunda novela, O lustre.
En 1963 publicó la que es considerada su obra maestra: La pasión según G. H. Meses después de la publicación de su última novela, La hora de la estrella, falleció víctima de un cáncer de ovario, a los 56 años en Río de Janeiro; el 9 de diciembre de 1977.