Mil veces no, puesta en escena escrita por Paula Zelaya Cervantes y Ana González Bello, es una comedia oscura con tintes apocalípticos, música en vivo y momentos absurdamente humanos.
Se sitúa en el año 2039 y retrata a Miranda, una mujer que lleva años aislada en su departamento, enfrente de cual, se muda Baltasar, un hombre que escapa de una secta suicida. Entre cuchillos, cartas, fantasías de venganza y piñatas fuera de lugar, se despliega una historia en la que la fragilidad emocional, el perdón y el anhelo de conexión se hacen presentes con crudeza y ternura.
La Coordinación Nacional de Teatro presenta Mil veces no tiene temporada hasta el 2 de julio de 2025, en el Teatro Orientación Luisa Josefina Hernández del Centro Cultural del Bosque (CCB).
La historia, lejos de tratarse de amor convencional, pone en el centro la pregunta: ¿Cómo es posible ser feliz en un contexto tan roto como el nuestro? “A veces el mundo se cae a pedazos y a nadie le importa. A veces, en medio del desastre, dos desconocidos se cruzan en un pasillo viejo, cargando cada uno sus propios fantasmas”, apuntan las autoras.
Paula Zelaya Cervantes, directora y coautora, explica que el proceso creativo fue tan desafiante como satisfactorio: “Lo más difícil siempre es escribir los textos, nos tomó como dos años. Empezó como una película y luego tuvimos que traducirla al lenguaje teatral. Esa adaptación fue complicada pero muy gozosa, porque le encontramos cosas muy lindas”.
Mil veces no nació como película
El equipo detrás de Mil veces no es el ejemplo claro de una producción hecha con creatividad, constancia y redes de apoyo. González Bello, además de actuar y escribir, participa como productora y encargada de difusión:
“Somos un par de amigas que escribimos una obra y nos juntamos con otros dos amigos para producirla. Todo salió de nuestras bolsitas: desde el sillón que nos regaló otra producción, hasta el vestuario que compramos en la Lagunilla. Fue un reto enorme, pero también un gran gozo”.
Luis Eduardo Yee, quien interpreta a Baltasar, destaca que “la obra es como una partitura. Cada palabra y repetición está medida para generar ritmo y humor. Encontrarle sentido a eso y mantenerlo vivo en cada función ha sido uno de los grandes retos”.
Por su parte Miguel Tercero, narrador y músico en escena, añade que “el texto está escrito con una precisión quirúrgica. El truco cómico está en los signos de puntuación, por eso aprenderlo al pie de la letra es tan importante”.
Con diseño de escenografía, iluminación y vestuario de Fernanda García, la puesta en escena se construye de un espacio visual íntimo y lleno de contrastes. La música original y el diseño sonoro están a cargo de Cristóbal MarYán, quien además participa en escena. Completan el equipo artístico y de producción: Marco Sánchez como stage manager, Daniel Bretón en la voz de Héctor, Emilio Trasviña como productor general y Brenda de Arrigunaga como productora ejecutiva.
La propuesta pone en el centro la vulnerabilidad emocional, la necesidad de perdonar y el intento –fallido, torpe, luminoso– de conectar con otro ser humano al final de los tiempos.
Mil veces no se presenta hasta el 2 de julio de 2025, los miércoles a las 20:00 h, en el Teatro Orientación Luisa Josefina Hernández del Centro Cultural del Bosque.
El fin del mundo está a la vuelta de la esquina. Pero al menos hay teatro.
«Mil veces no»
📅Del 14 de mayo al 2 de julio
Miércoles 20 h
Edad recomendada: 14+
Duración aproximada: 120 min
🎟️Entrada $150. Descuentos habituales
📍Teatro Orientación, Luisa Josefina Hernández pic.twitter.com/wmIf0N81A1— Coordinación Nacional de Teatro (@teatroinbal) May 13, 2025