La Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara homenajeó a la editora Cristina Urrutia, la artífice de un proyecto que, en 1993, apostó por producir libros que respondieran a la realidad de niños y jóvenes y no a las políticas de las grandes industrias culturales: la Editorial Tecolote.
“Nuestro objetivo fue introducir a los jóvenes en forma amena en la complejidad de la historia, fomentando en ellos una actitud crítica. Pensamos que no se debe de menospreciar a los niños y jóvenes, y debemos apostar al lector, confiar en su inteligencia”, dijo Urrutia, quien recibió de manos del rector de la Universidad de Guadalajara, Ricardo Villanueva, el reconocimiento al Mérito Editorial 2021.
La fundadora de Ediciones Tecolote compartió que la inexistencia en el país, o en el mejor de los casos, la precariedad, de libros infantiles que respondieran a su contexto, la impulsó a convertirse en editora y no una vocación innata.
“No nací editora, ni fue mi vocación inicial en la vida. Me convertí en editora para alcanzar un objetivo ante la inexistencia en México de libros para niños que recrearán nuestro entorno, ya que hace 40 años la literatura infantil en este país era muy precaria y las editoriales privadas habían perdido el interés por producir literatura para los más jóvenes”, mencionó.
Con la firme convicción de que la riqueza del patrimonio cultural se perdería si las futuras generaciones no se apropiaban de ella, Urrutia fundó Ediciones Tecolote abriéndole el camino a otros pequeños sellos editoriales.
No obstante el papel fundamental que desempeñan las pequeñas editoriales al llenar los vacíos que no abordan las grandes empresas, dijo, están en riesgo de desaparecer por los embates económicos y el poco apoyo gubernamental, por ello llamó a seguir apoyando el trabajo de estos proyectos.
“Exhorto a la sociedad civil para que participe y apoye estos proyectos para que sean autofinanciables y no caigan en los caprichos sexenales”, afirmó.
Una de las apuestas editoriales que ha producido Ediciones Tecolote es recuperar las diferentes voces y versiones sobre acontecimientos históricos para, desde sus libros, cuestionar la voz autoritaria del Estado y recuperar las otras caras de la historia, para así “introducir a los jóvenes en la complejidad de la historia y fomentar el sentido crítico”, expresó.
En el homenaje, Marisol Schulz Manaut, directora de la FIL, recordó que a principios de la década de los noventa, la industria editorial de México era incierta debido al entorno económico complicado que se vivía, por lo que fundar un sello editorial para niños y jóvenes era visto como innecesario y atrevido. Eso no detuvo a Urrutia, a quien Schulz se dirigió como “talentosa” e “inalcanzable editora”.
A los elogios también se sumó el director de arte Eugenio Caballero al asegurar que la editora es una visionaria cuyos libros han formado a generaciones de menores abarcando temas como la historia, las tradiciones, la cultura mexicana, el arte popular y la migración.
Estos abordajes, sostuvo el ganador de un Oscar en 2007, “han abierto el mundo a los niños y jóvenes de este país, a quienes sus libros les cuentan algo con lo que se sienten identificados. Cristina siembra semillas que darán frutos en el futuro”.
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¡Muchas gracias a la @FILGuadalajara por este reconocimiento!
Estamos de fiesta ?
Muchas gracias a tod@s nuestr@s lector@s por hacer esto posible. pic.twitter.com/WKZtRfXKGd
— Ediciones Tecolote (@edtecolote) November 30, 2021
