Jaguar, nuevo blanco de mafias como alternativa al tigre

El WWF calcula que hay unos 64 mil ejemplares en 18 países de América Latina, pero ya se extinguió en EU, El Salvador y Uruguay
El 29 de noviembre se celebró el Día Internacional del Jaguar, establecido por Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo
La especie se considera casi amenazada. Foto: WWF.

“Bajo el sol jaguar” se llama aquel cuento de Italo Calvino, el novelista deslumbrado por la gastronomía de “Uajaca”, como él instaba a pronunciar Oaxaca. Hoy ese felino propio de América, venerado como un dios animal por incas, mayas y aztecas, afronta el avance del cemento, el hormigón y la deforestación por la presión humana, con riesgo de extinción en muchas regiones, y sustituto del tigre como blanco de las mafias del tráfico de especies.

Esos grupos del crimen organizado están mirando hacia el jaguar como una nueva víctima, en parte como alternativa al tigre, cuya persecución y tráfico de sus partes están mucho más vigilados, por lo que los últimos jaguares o yaguaretés sobreviven en 18 países de Centro y Sudamérica, desde México a Argentina, informa el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF).

Prácticamente extinguido en Estados Unidos, El Salvador y Uruguay, según la Unión Mundial para la Naturaleza (UICN), sólo quedan 64 mil jaguares en libertad, nueve de cada diez en países que comparten la zona del Amazonas, cuya día en favor de su protección se celebró un par de días atrás, la misma zona a la que Jair Bolsonaro, ex presidente de Brasil, restó importancia como pulmón planetario.

Blanco alternativo de la caza furtiva. Foto: WWF.
Blanco alternativo de la caza furtiva. Foto: WWF.

Nueva víctima del tráfico

A mediados de los años 70 y gracias al apoyo de los socios de WWF y los controles de Cites se consiguió reducir su trampeo con destino a zoológicos y la venta de sus pieles en Europa y EU. Pero la caza furtiva y el comercio ilegal de sus partes (pieles, patas, garras y colmillos) continuaron a escala local y, últimamente, el problema se ha extendido y agravado situando al jaguar como nueva víctima codiciada por las mafias del tráfico de especies.

El jaguar es considerado el sustituto ideal de los huesos de tigre para la medicina tradicional oriental. Sobre todo entre la comunidad asiática que vive en Latinoamérica o en China, principal destino del tráfico ilegal de sus partes, donde sus testículos son utilizados como afrodisiaco y sus garras y colmillos para fabricar llaveros y colgantes a modo de talismán.

 

Objetivo 2030: recuperarlo

A principios de noviembre en WWF presentaron el Plan Jaguar 2030, con acciones para recuperar sus poblaciones y sus hábitats en 14 países de su área de distribución. En los próximos años fortalecerán el llamado Corredor del Jaguar, asegurando y mejorando la conectividad en 15 paisajes prioritarios para la especie, estimulando el desarrollo sostenible en las regiones donde vive el felino y reduciendo sus conflictos con las comunidades locales.

Conservando el jaguar, el mayor felino de América, y su hábitat, se contribuye a revertir la pérdida de especies y a disminuir la probabilidad de aparición de nuevas enfermedades de origen animal y pandemias, como el covid-19, expone WWF.

 

 

Total
0
Shares
Previous Article
Majo Pérez y Ana Quintero Guzmán en "Indecente". Foto: Luis Quiroz.

“Indecente” y “Todo mundo habla de Jamie” arrasan con nominaciones

Next Article
Filostre 2023

Microcuentos. “(Des)empatía” y “Evasión”

Total
0
Share