París. Desde la “ciudad de las luces” hasta el corazón de Hollywood, los Juegos Olímpicos de París concluyeron con el tradicional paso de la antorcha al próximo anfitrión de los Juegos Olímpicos de verano, Los Ángeles.
La espectacular celebración de los 33º Juegos Olímpicos de Verano comenzó con el rostro de los Juegos, Leon Marchand, recogiendo la llama del Jardin des Tuileries en el centro de la ciudad.
La ceremonia pasó luego a la presentación de los abanderados y los atletas restantes ante un Stade de France con entradas agotadas y espectadores de todo el mundo que pudieron disfrutar de una impresionante exhibición de arte escénico, que mostró el estilo único de la nación francesa.
La ceremonia, que comenzó con acrobacias y performances, y el montaje de los anillos olímpicos en lo alto del Stade de France, dio paso a un festival de música pop francesa. La banda indie francesa Phoenix ocupó el centro del escenario, junto con el artista electrónico Kavinsky y Ezra Koenig de Vampire Weekend.
Luego la energía se calmó cuando el presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Thomas Bach, y Tony Estanguet, presidente del Comité Organizador de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de París 2024, pronunciaron discursos.
“Sus actuaciones fueron sencillamente asombrosas. Compitieron ferozmente entre sí. Cada competencia estuvo al borde de la perfección. Cada actuación desató el entusiasmo en todo el mundo. Nos mostraron de qué grandeza somos capaces los humanos. Los Juegos Olímpicos de París 2024 fueron una celebración de los atletas y del deporte en su máxima expresión”, dijo Bach.
Los eventos en vivo en el estadio concluyeron con la estrella de cine Tom Cruise descendiendo del techo del Stade de France y sacando la bandera olímpica del estadio en una motocicleta, antes de trasladarse a un avión y entregar la bandera a Los Ángeles.
La ceremonia finalizó con 70 mil personas viendo el concierto pregrabado de Los Ángeles 2028 en las pantallas gigantes mientras Red Hot Chili Pepper, Billie Eilish y Snoop Dogg entretenían a la multitud desde Venice Beach.
A pesar de los impresionantes escenarios y las memorables ceremonias, el deporte, como siempre, siguió siendo el centro de atención.
Leon Marchand, Zheng Qinwen, Pan Zhanle, Noah Lyles, Antoine Dupont, Ma Long, Simone Biles, Mijain Lopez, Armand Duplantis, Sifan Hassan y Teddy Riner son solo algunos de los nombres que iluminaron la ciudad de las luces.
Con el apoyo de una multitud local electrizante, la nación anfitriona Francia produjo nuevas estrellas y reafirmó el estatus legendario de otras.
Marchand se convirtió no sólo en el rostro del equipo olímpico francés o de las pruebas de natación, sino de todos los Juegos. El joven de 22 años dominó la piscina con cuatro medallas de oro y una de bronce, emulando los logros de Michael Phelps.
Dupont, la superestrella del rugby francés y abanderado de la ceremonia de clausura, también cautivó a los franceses. A pesar de haber dejado de jugar con quince jugadores hace menos de un año, Dupont iluminó el Stade de France y consolidó su nombre como uno de los mejores jugadores de todos los tiempos.
El judoca francés Teddy Riner se consolidó aún más como el mejor judoca de todos los tiempos, regresando para ganar otra medalla de oro en la categoría de peso pesado masculino.
En atletismo, el Stade de France fue testigo de las destacadas actuaciones del sueco Duplantis, los estadunidenses Lyles y Sydney McLaughlin-Levrone, el primer medallista de oro de Santa Lucía, Julian Alfred, la triple medallista Sifan Hassan y la botsuana Letsile Tebogo.
El saltador con pértiga Duplantis, con su aspecto juvenil, rompió internet, los corazones y el récord mundial con su actuación perfecta en la final masculina.
McLaughlin-Levrone y Duplantis se convirtieron en las únicas que batieron récords mundiales individuales en la pista, con McLaughlin-Levrone derrotando a la favorita Femke Bol en una final de 400 metros.
Lyles ganó la final de 100 metros más reñida de la historia, mientras que Alfred consiguió la primera medalla de Santa Lucía en los 100 metros femeninos y Letsile Tebogo ganó el primer oro olímpico de Botsuana en los 200 metros masculinos.
Para China, fueron otros Juegos Olímpicos memorables. A pesar de no haber logrado el primer puesto en el medallero el último día, el país volvió a abrir nuevos caminos y aseguró su legado como una de las grandes naciones olímpicas.
Zheng ganó el primer oro en tenis individual de Asia, Pan demolió el récord mundial de 100 metros libres masculino y Ma se convirtió en el atleta olímpico más condecorado de China con seis medallas de oro.
China también prosperó en buceo, boxeo femenino, bádminton, tenis de mesa y levantamiento de pesas, lo que ayudó al país a alcanzar una asombrosa cifra de 40 oros, igual a la de Estados Unidos.
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— LA28 (@LA28) August 12, 2024
