I.
Vida desespiritual
Hizo de las compras su religión y de los centros comerciales un santuario. Visitaba con encendido fervor sus lugares sagrados, como la Catedral de Hermés, la Basílica de Nuestra Señora de Chanel, el Templo de San Salvatore di Ferragamo, el Monasterio de Montblanc, la Iglesia de San Louis Vouiton o la Capilla de Santa Carolina de Herrera, sólo por mencionar algunos; pero por alguna razón que no entendía, mientras más los frecuentaba, más crecía el ya inmenso vacío que sentía en su interior.
II.
Mejor así
Se evadió de su evasión y así, volvió a la realidad. Fue entonces cuando se dio cuenta de que lo mejor era volver a su evasión.