I
Pro(no)grafía, una propuesta decorosa
Terminada la fiesta de su boda le hizo una propuesta desconcertante.
—Te propongo una orgía: tú, yo y nosotros dos.
Y accedió.
II
Evasión
Era tal el drama de la novela que estaba leyendo que, a ratos, tenía que salir a su vida real para evadirse de su lectura.