El Museo de Arte Moderno (MoMA) de Nueva York presentará un ciclo dedicado a la legendaria actriz María Félix, La Doña (1914-2002), una selección de los trabajos más significativos de una de las estrellas de la Época de Oro del cine mexicano.
En alianza con MoMA de Nueva York y con el apoyo de la Cineteca Nacional, la Filmoteca UNAM, el Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM), el ciclo María Félix, La Doña, se proyectará del 11 al 27 de julio de 2025.
Organizado en colaboración entre Daniela Michel, fundadora y directora del FICM; Chloë Roddick, programadora del festival; Dave Kehr, curador del Departamento de Cine del MoMA; y Steve Macfarlane, asistente del Departamento de Cine, el programa María Félix “La Doña” presenta una selección de los trabajos más significativos realizados entre 1942 y 1957.
Esta selección incluye colaboraciones con directores de la talla de Emilio Fernández y Roberto Gavaldón. Desde su primer papel en Doña Bárbara (1943, Dir. Fernando de Fuentes) hasta la mundialmente aclamada Enamorada (1946, Dir. Emilio Fernández), estas películas capturan la imponente presencia en pantalla que hizo de Félix un símbolo perdurable de la identidad cultural mexicana.
— MoMA Film (@MoMAFilm) June 8, 2025
MoMA de Nueva York repasa la carrera de La Doña
Su carrera europea está representada en la película francesa Can Can (1955), de Jean Renoir, que destaca su éxito internacional a pesar de su famosa negativa a aprender inglés, de rechazar un papel protagonista en la película de Hollywood Duelo al sol y de mantener un orgulloso desdén por la industria cinematográfica estadunidense.
Fuera de la pantalla, su tumultuosa relación con el compositor Agustín Lara, su estrecha amistad con luminarias artísticas como Frida Kahlo y Diego Rivera, y los exóticos rumores que alimentaban la prensa sensacionalista mexicana, realzaron su mística como una de las figuras más cautivadoras de México y del cine mundial.
María Félix no fue sólo una estrella, fue un fenómeno cultural que redefinió la feminidad en la pantalla a través de sus retratos de mujeres difíciles y dominantes que desafiaban las convenciones sociales de su época.
Ganadora de cuatro Arieles por las películas Enamorada (1946), Río escondido (1948), dirigidas por Emilio “El Indio” Fernández, y Doña Diabla (1950), de Tito Davison, además un Ariel de Oro y una Diosa de Plata en reconocimiento por su trayectoria, María Félix fue más que una de las actrices más reconocidas de la época de oro del cine mexicano.
A lo largo de su carrera participó en 47 producciones en México, Argentina, España, Italia, Francia y Marruecos compartiendo créditos con grandes nombres como Pedro Armendáriz, Rossano Brazzi, George Marchall, Yves Montand, Gerard Philipe, Vittorio Gassman, Curt Jurgens, Jack Palace, Jorge Mistral, Arturo de Córdova, Jorge Negrete, Carlos Thompson, Ignacio López Tarso y Pedro Infante, entre otros.
Los personajes que interpretó a lo largo de su trayectoria rompieron paradigmas en el mundo del cine. El rol de la mujer pasó de ser el de una damisela en peligro al de una mujer fuerte y aguerrida, capaz de enfrentar diversos obstáculos.
La Doña obtuvo este sobrenombre luego de participar en la cinta Doña Bárbara (1943), dirigida por Fernando de Fuentes y Miguel M. Delgado, en donde encarnó a una mujer soberbia y temperamental.
Su personalidad, su inteligencia y su gran belleza la convirtieron en fuente de inspiración para muchas personalidades, entre ellos su esposo Agustín Lara, quien decidió regalarle a Felix la canción “María bonita” con motivo de su matrimonio.
Jean Cocteau, Leonora Carrington, Remedios Varo, José Clemente Orozco, Diego Rivera, Renato Leduc, Xavier Villaurrutia, Salvador Novo, Pita Amor, Luis Spota, Octavio Paz, Carlos Fuentes, José Alfredo Jiménez, Cuco Sánchez y Juan Gabriel, entre otros artistas de diversas disciplinas se han inspirado en ella para crear diversas obras.
María Félix, además, fue la inspiración para grandes nombres del mundo de la moda como Balenciaga, Vivier, Ives Saint Laurent y Cartier, marca a la cual hacía excéntricos encargos en diseño de joyas.
Su fuerte e imponente personalidad la hicieron destacar como líder de opinión, por lo que durante los años 90 abogó por la educación y progreso de las mujeres mexicanas en el ámbito público.
En 1996 recibió la orden de Commandeur dans I´Ordre National des Arts et des Lettres, la más alta distinción que otorga el gobierno de Francia, convirtiéndose en la primera mujer en América Latina en recibir esta distinción.
La estrella de María Félix dejó de brillar el 8 de abril de 2002 y sólo la vida de una figura tan emblemática como la de ella podía ser celebrada con un desfile desde su residencia en Polanco, hasta el Palacio de Bellas Artes, donde fue despedida por cientos de personas.
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