Poema 1. (Guiño a Girondo)
Días de improvisar recitales con versos y saliva, pagados con desmayos constantes,
contantes y sonantes
Días de aguantar la respiración bajo las sábanas, de ropa salpicando el cuarto y de dar las buenas noches al despuntar el alba
Días plagados de letreros de precaución: «ponga el corazón bajo su propio riesgo, próximo derrumbe»
Días santos, días floridos, días francos, días de gloria, la batalla diaria
Días de besar la miseria propia, de tenues suspiros robados de aire ajeno, días suplicantes
por alargue y compensación
Días de esconder en lo más profundo un recuerdo, por si es cierto que hace siglos
nos partió un rayo antes de olvidarnos
Días de luna que pinta el inicio de tus costillas y saber que no saliste de una mía,
días perdidos, deshilachados, desfallecidos
Un par de días, pero todo el día
Poema 6
Pudimos revivir a Van Gogh con nuestros cielos
¿pintamos con las manos esa noche?
¿caminamos de noche y cruzamos los dedos?
Sospecho que hoy me piensas y ya soy un recuerdo.
La tarde se cierne sobre el lago,
entremos a esa gala, ¿quieres helado?
Aquí sigo
fingiendo esperar tu mano.
¿Bailarás en las ruinas bellas?
La mañana te ha maltratado,
¿llegaste a casa?
¿dormiste en un lugar techado?
¿cuánto te duele hoy tu secreto?
¿fumaste demasiado?
Quisiera decir que no te escribo a diario
y a veces, en susurros, y te quiero en mis olvidos
y sospecho
que ahora me piensas.
Y sólo soy un recuerdo.
Poema 7
Con ganas de hacer tu poema nada
de abandonar las palabras a su suerte,
dejarlas huérfanas en venganza
y devastarlas minuciosamente
Echar a la calle el deseo imperioso
de quitarle todo verso al suspiro
despreciar encantos, desairar el embeleso,
que aquí muera de hambre tu recuerdo
Borrar el calendario de tu tiempo
y romper por los tobillos tus estatuas
tachar las conmemoraciones, tu tacto,
evaporar los besos de salivas saladas
Que aquí se detenga el universo
todos mis yo ya se han rendido
te quise entera con amor perverso
tu hechizo está roto pero has vencido.
Poema 8
Eres el rostro que me falta en el espejo
la mueca del olvido
la sombra de un dolor itinerante
la persecución por las esquinas, el delirio
el café que no toqué hasta el mediodía
pasar sin hambre el domingo
desde que sé que no me quieres
eres aguardiente, olor a cansancio, llaga de un costado
la pena en la mirada
eres el infierno donde habito.
Esta revolucionaria comedia es una indagación en torno al amor libre, la pareja abierta y el poliamor
La obra en el @Helenico https://t.co/qxhiwC1iNh— Fusilerías (@fusilerias) February 11, 2025