Gene Simmons, el popular Demonio en el bajo de Kiss, ofrece jurar ante la Biblia que la despedida de la banda, fechada el 2 de diciembre próximo en el Madison Square Garden de Nueva York, es un hecho y no por cuestiones de venta de entrada ni nada, sino que “todo tiene que ver con la madre naturaleza”, es decir, la edad.
En una entrevista con Andy Green para Rolling Stone, divulgada anoche en su página digital, el músico adelanta que la banda invirtió un millón de dólares adicionales para el espectáculo final con la única intención de darle a sus seguidores un empujón final, un acto grandioso, y descarta grabar un disco de ese concierto: “Se arruinó todo con la transmisión y la descarga. Kiss no es una organización benéfica”.
Sobre sus futuras actividades, el bajista cuenta que es socio fundador de Rock and Brews con restaurantes en todo Estados Unidos, además de casinos y la productora cinematográfica Simmons/Hamilton, que está ahora filmando dos películas en Nueva Zelanda, una con Ben Kingsley y Aaron Eckhart, dirigida por Renny Harlin, y otra con Laurence Fishburne y Bella Thorne.
Una de las dudas más constantes sobre el concierto final es si la familia se reunirá de nuevo, como sucedió cuando grabaron el álbum Unplugged para MTV, cuando a Gene y Paul Stanley se sumaron a medio recital Ace Frehley, el guitarrista espacial, y Peter Criss, el felino baterista, pero el Demonio ataja la especulación: “Personalmente he preguntado a Ace y Peter más de una vez. La respuesta fue no”.
Boletos agotados y venta online
Escribe Green: “Es apropiado que Kiss termine su histórica carrera en el Madison Square Garden: se maquillaron por primera vez hace cincuenta años en una sala de ensayo a diez cuadras al sur de la arena. A la banda le tomó sólo cuatro años pasar de pequeños clubes al Garden. Estuvieron de regreso en lugares más pequeños durante algunos años difíciles en los años ochenta, cuando realizaron giras sin maquillaje, pero la decisión de pintarse la cara una vez más y reunir la alineación clásica en 1996 revitalizó la marca y los mantuvo en los estadios incluso después de Simmons y Paul Stanley. Una vez más se separaron del baterista Peter y de Ace poco después del cambio de milenio. Desde entonces, Eric Singer y Tommy Thayer los reemplazaron”.
El concierto final está agotado, sólo hay asientos dispersos para el penúltimo espectáculo en el Madison Square Garden una noche antes, pero siendo Kiss el grupo ofrece a los fans la oportunidad de comprar el último a través de pago por evento.
En la charla, Simmons reprocha que el entrevistado ironice sobre el no uso de drogas de Kiss, y explica: “Es útil que nunca te hayas drogado, nunca hayas fumado ni hayas estado borracho. Tu cuerpo reacciona al combustible que le pones. Así que somos muy afortunados, porque no por diseño, no por planificación, sino literalmente en la banda nadie fuma siquiera, nadie bebe y a nadie se le permite drogarse”.
“¿Cómo procesaste las críticas de la prensa en los años setenta?”, pregunta el reportero: “Nunca significó nada. Si miras a tu alrededor, los críticos son en realidad una forma de vida innecesaria en la faz del planeta. Esto es lo que quiero decir. Y no es una bofetada infantil ni nada por el estilo. Si las críticas dejaran de existir, ¿sería diferente la vida en la Tierra? Si la policía, los bomberos o los profesores dejaran de existir, eso sí tendría un gran impacto en el planeta”.
El músico también frenó las especulaciones sobre los eventuales invitados al último show, habida cuenta de que Kiss siempre ha tenido grandes bandas como abridores, con nombres como Judas Priest, Pantera y Rammstein: “Como puedes imaginar, hemos recibido todo tipo de llamadas de personas destacadas, reconocerías todos sus nombres, que quieren saltar al escenario. Y hasta ahora hemos dicho ‘no’, porque cuando tienes a otros artistas estás presumiendo”.
Aunque descarta un regreso de Kiss, sí ve la posibilidad de espectáculos de él y Stanley de forma individual. “Paul tiene su banda Soul Station. Estoy seguro de que le encantaría tocar en algunos shows. Tengo la banda Gene Simmons. En algún momento, tal vez quiera subirme al escenario y tocar algunas canciones. Pero el aspecto físico de Kiss dice que despedirnos es lo correcto, en el lugar correcto, en el momento correcto. BB King jugó hasta los ochenta años, pero estaba sentado en el escenario y nosotros no podemos hacer eso, porque nunca tocamos sentados”.
#KISSARMY: Experience our final concert EVER, LIVE on Pay-Per-View, streaming exclusively on @ppv_com!#EndofTheRoadPPV | Dec. 2, LIVE from @thegarden
Order worldwide on https://t.co/rweD09tY39 (https://t.co/qwa1W16V7S ); also available through your cable/satellite provider in… pic.twitter.com/wx5pgInYb1
— KISS (@kiss) November 9, 2023