La Habana.- Adolfo Rivera, un ingeniero mecánico cubano jubilado que vive en el distrito de Miramar de La Habana, ha hecho realidad su sueño de construir un avión biplaza de madera.
Después de varios intentos desde 1965, el cubano de 70 años decidió darle una nueva oportunidad a pesar de las dificultades para conseguir algunas herramientas y accesorios para aviones en medio de las restricciones económicas impuestas por las sanciones de Estados Unidos contra la isla.
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En 2012, una vez que obtuvo el permiso de las autoridades de aviación del país, el innovador aeronáutico comenzó a fabricar un avión monomotor en su garaje.
Aunque tiene algo de experiencia volando aviones, confía en dos pilotos más jóvenes que están dispuestos a llevar su máquina voladora al cielo.
«Por supuesto, un hombre por sí solo no puede competir con los fabricantes de aviones mundiales. Puedo hacer una gran contribución para que más innovadores locales fabriquen aviones caseros«.
Con un peso máximo de 400 kilogramos, el prototipo de avión de Rivera, en teoría, puede hacer un vuelo sin escalas durante dos horas con un límite de velocidad de 145 km/h.
Utiliza componentes de producción local o importados, incluido un motor Rotax UL 582 reacondicionado donado por un club de aviación local.
Además de los fines recreativos, el avión experimental aspira a ayudar a vigilar las fronteras marítimas y ofrecer servicios de inspección forestal y ambiental.
Miguel Ángel Armas, presidente de la Federación Cubana de Deportes Aéreos, dijo que el nuevo avión ha sido construido de acuerdo con los estándares internacionales.
«Cumple con todos los requisitos técnicos por el momento. Al hacer esto, demostramos que podemos construir aviones en la isla. Podemos contribuir a ahorrar dinero de las importaciones».
El avión biplaza deberá pasar rigurosas pruebas del Instituto Cubano de Aeronáutica Civil para obtener el permiso de vuelo y aterrizaje.
Para fin de año, se espera que el avión de fabricación local realice su primer intento de despegue en el aeródromo del Club de Aviación de Cuba en Varadero, el balneario del país.
Cuando se le preguntó si se daría por vencido si fallaba el próximo intento, Rivera dijo que no hay razón para el pesimismo.
«No tengo ninguna duda de que lo lograré. Soy un soñador«, agregó sonriendo el cubano.
Adolfo Rivera, a retired Cuban mechanical engineer living in Havana, has seen his dream of building a two-seater wooden airplane come true https://t.co/0OaD0Yfjpw pic.twitter.com/5VUO00wdwB
— China Xinhua News (@XHNews) March 3, 2021