“Somos lo que leemos”, la impronta que dejaron ciertos libros en la memoria, en el alma, en la visión del mundo que hoy nos asusta tanto y que ayer nos pareció feliz. La escritora y directora teatral Bárbara Colio ha querido representar así la forma en que Cervantes nos inoculó la locura, Dostoievski la culpa y Borges la imaginación.
“También somos las historias que nos han contado”, añade, y aquí el aforismo quiere denunciar el rastro de corrupción que introducen en toda narrativa los responsables de tejerla. En su más reciente obra, Marina e Isabel, el mundo en juego, que tiene de protagonistas a la Malinche e Isabel la Católica, intenta deshacer ese entuerto.
“Ahora estoy cuestionando esas historias que nos han contado. Finalmente una historia es un cuento, una ficción, porque la historia que conocemos es la historia que nos contaron los vencedores, y los vencedores han sido los hombres, que han tenido mayor libertad social, económica y religiosa desde el principio de los tiempos”.
En esta obra, ganadora del Premio de Dramaturgia Óscar Liera 2021, Bárbara Colio ha mantenido su prolífica reinvención de personajes femeninos: Isabel la Católica se presenta como dueña de una empresa trasnacional llamada “México” y la Malinche es líder de los trabajadores que amenazan con ir a huelga.
En Julieta tiene la culpa, obra que se estrena este lunes 4 de octubre en el Centro Cultural Helénico, Bárbara Colio reúne a Blanche Dubois, de Un tranvía llamado deseo (Tennessee Williams); Nina, de La gaviota (Antón Chéjov), y Nora, de Casa de muñecas (Henrik Ibsen) para darles un nuevo destino. Ellas descubrirán que es posible la bondad entre desconocidas y el público calibrará hasta qué punto las personas anónimas con quienes nos cruzamos en la calle pueden transformarnos.
“Desde hace muchos años Isabel la Católica me parece un personaje impresionante. Si hubiera nacido con internet en la mano habría llegado a Marte; fue una mujer adelantada: se centró en hacer un reino, en unificar a España, en apoyar la expedición de Colón, en expulsar a judíos y musulmanes, en parir reyes y reinas.
“Por el otro lado, veo en la Malinche la mayor historia que existe en aprovechamiento de los recursos que alguien pueda tener a mano; era impresionante su capacidad de aprender idiomas y dialectos para salvar su vida y hacerse de un lugar entre los conquistadores en un momento en que las mujeres eran esclavas y muy pocas princesas”.
“La historia siempre ha sido usada para un fin político y, por tanto, no representa la esencia de lo que pasó. Ante esa situación me pregunté quiénes eran realmente estos personajes y me propuso inventarlos para contar lo que hubiera pasado si se encontraban”.
—¿Se trata de obras feministas?
—No me gusta etiquetarme porque las etiquetas siempre son una cosa distinta para cada persona y terminan sirviendo para otros fines. Jamás he dicho que soy feminista, pero en más de 30 obras que he escrito los personajes femeninos siempre tienen en sus manos la opción de elegir su destino. No soy feminista por moda o tendencia.
—¿Qué enseñanzas te dejó el encierro por la pandemia?
—Obtuve una que se resume en una frase: “Es lo que hay”. Es una expresión que me ha salvado la vida varias veces y alude a que debemos acostumbrarnos a vivir con lo que tenemos a mano. La prioridad en esos momentos era –y sigue siendo– la salud física, emocional y espiritual… y luego vemos qué más nos regala la vida.
—¿Pudiste escribir?
—Escribí una obra que se titula Marina e Isabel, el mundo en juego, que ganó el Premio de Dramaturgia Óscar Liera 2021.
—El junio pasado tuviste de invitado al dramaturgo español José Sanchis Sinisterra en la nueva etapa de tu programa Descorche, ¿cómo fue retomar el diálogo con tu maestro?
—Hablar con José siempre es una vuelta al mundo. Cuando decidí educarme en la dramaturgia me fui a Madrid con el mejor maestro que había en ese momento en español. Sigue siéndolo 25 años después. Cualquier dramaturgo, mujer o varón, en lengua española ha pasado por la escuela de José.
—¿Qué sigue para ti?
—Primero cumplir la temporada de Julieta tiene la culpa. Segundo, que la gente vaya al teatro. Tercero, trabajar en la puesta en escena de Marina e Isabel, porque a pesar del premio no he podido reunir el dinero para producirla. La gran paradoja en México es que es muy difícil para los creadores producir teatro, pero no para quienes comercian con el teatro.
Julieta tiene la culpa se presentará del 4 de octubre al 24 de noviembre en el Centro Cultural Helénico, Av. Revolución 1500; habrá funciones lunes, martes y miércoles a las 20 horas.
La obra se repone con el mismo electo: Carmen Mastache, Sofía Sylwin y Verónica Merchant, además de Bárbara Colio en la dirección, luego de que en marzo de 2020, a 10 días de su estreno, fue suspendida por la emergencia sanitaria.
Bárbara Colio ha obtenido el Premio Internacional María Teresa León para Autoras Dramáticas (España, 2004), Premio Nacional de Dramaturgia Víctor Hugo Rascón Banda (2009), Premio Juan Ruiz de Alarcón (2017) y Premio de Dramaturgia Óscar Liera (2021).
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— BarCoDrama Teatro (@BarCoDrama) October 3, 2021
