Una joven promesa ecuestre se abre camino en las pistas del país; con apenas 22 años, Nirvana Hank busca colocarse entre las mujeres líderes del sector e inspirar a sus pares través de la equitación y el amor por los caballos.
Por Nirvana corre sangre deportista, pues sus hermanos mayores Alejandro Hank y Tigre Hank gozan de una reconocida trayectoria como torero y tenista, respectivamente.
Desde muy pequeña, mantuvo contacto directo con múltiples disciplinas, destacando en el tenis, ballet, flamenco, equitación y natación. De la mano de su padre, Jorge Hank Rhon, quien fue el que le inculcó el amor por estos animales y la alentó en sus clases de equitación, e impulsada por su hermano José Mario, empezó desde muy joven la pasión por la disciplina de alta escuela.
Al llegar a los 12 años, su caballo murió, por lo que la joven decidió cambiar a la disciplina olímpica de salto; a los 16 años dejó de montar cinco años para dedicarse a la universidad y a partir de 2021 retomó el mundo de los caballos de manera profesional.
La vara es alta para este año, ya que busca llevar a México a la victoria en los podios más importantes no solo como amazona de origen mexicano, sino consolidándose como una líder en el sector.
“La equitación es sumamente divertida y apasionante, puede crear una increíble adicción saludable, me gustaría compartir esta sensación con todos aquellos jóvenes que aún viven presos del miedo y la incertidumbre, que no se atreven a dar el siguiente paso.
“Si tienen la oportunidad, monten un caballo, es una conexión mágica, un tiempo en paz para calmar la mente, por eso, la equinoterapia es una herramienta muy útil para mejorar la calidad de vida. De hecho, en la Grecia Clásica ya se aconsejaba montar a caballo como método para prevenir y curar diversas dolencias del cuerpo y de la mente”, afirma Nirvana.
La jinete destaca la importancia de tejer lazos con sus caballos Texcoco LS, Mi Cassino, y Go de H: “Tengo mucha conexión, química y comprensión mutua; son seres vivos que tienen emociones, son seres pensantes, son atletas; necesitan buena alimentación,
El equipo de Nirvana Hank está conformado por Nicolás Pizarro, su primer entrenador en práctica de salto ecuestre; Jorge Canedo también entrenador, y el caballerango Pedro Barrientos, quienes pronostican buenos resultados en las pistas de Santa Jacinta en el Estado de México, Puebla, Guadalajara, Tijuana, Monterrey, Querétaro y Coapexpan, entre otras sedes.
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C.S. Lewis
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