La pandemia del covid-19 afectó el Día del Amor y la Amistad, la relación social y los vínculos físicos, pues hoy abrazar, visitar a alguien, incluso estrechar su mano lo dejamos de hacer por temor a enfermarnos, refiere Verónica Montes de Oca Zavala, del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM.
“Hemos perdido esa empatía y sensibilidad por los demás, porque concentramos toda nuestra energía en la no enfermedad ni siquiera en la salud, nos hallamos en la perspectiva de la supervivencia”.
A propósito del Día del Amor y la Amistad, la socióloga y demógrafa universitaria indica que aun cuando esta fecha se proyecta como impulsora de la economía, es necesario mirar más allá del aspecto comercial: La gente está cansada, nuestra salud mental agotada y, obviamente, “nos vemos ‘cuadriculadamente’ todos los días”.
La también ex presidenta de la Asociación Latinoamericana de Población asegura que se debe apelar a la libertad, a romper con esa reproducción del amor romántico sumiso y subordinador, que se propicia a partir de la lógica mercantil.
Montes de Oca Zavala manifiesta que actualmente se viven situaciones destructivas que no están relacionadas con el amor, como nuestra interacción con la naturaleza y el capital natural.
Tampoco debemos perder de vista la emergencia de movimientos sociales que incluso con la pandemia se hacen notar, que apelan a relaciones amorosas, igualitarias en materia de derechos, con una gama de diversidad y formatos.
En México, de acuerdo con datos del Censo de Población y Vivienda 2020, 38 por ciento de las personas de 15 años y más está casada, 30 por ciento es soltera y 20 por ciento vive en unión libre.
La información del Inegi indica que en 2019 se realizaron 504 mil 923 matrimonios legales; de estos 501 mil 327 fueron de parejas de distinto sexo, y tres mil 596 del mismo sexo. Sin embargo, de 2000 a 2019 la relación divorcios-matrimonios casi se quintuplicó, al pasar de siete a 32 divorcios por cada cien matrimonios.
Además, de 2000 a 2020 el porcentaje de la población casada disminuyó de 49 a 38 por ciento, en contraste con la que vive en unión libre que pasó de 11 a 20 por ciento. Asimismo, más de 50 por ciento de las mexicanas de 20 a 24 años de edad son solteras.
Al respecto, Montes de Oca, doctora en Ciencias Sociales con especialidad en Población por El Colegio de México, comenta que estos datos significan apropiación de la libertad por parte de las mujeres.
“Quiere decir que están reflexionando en que el matrimonio no es su única vía para vivir mejor y para tener una compañía».
«Puede estar reflejándonos diversas formas de vínculos amorosos, que no necesariamente tiene que ver con el matrimonio, y que no tienen que ver con las relaciones tradicionales, que son de tipo patriarcal, en la que muchas mujeres se subsumen”, explica.
Esta soltería elegida, reflexionada, es muestra de la libertad, de que ellas tienen mayor escolaridad, y participan más en el mercado de trabajo.
“Los matrimonios ahora ya no duran tanto como antes porque podemos ejercer nuestra autonomía, y decidir parar una relación tóxica, o hay parejas que funcionan mucho mejor separadas que juntas todos los días. Para vivir una relación de pareja, no tienes que atravesar el matrimonio, ni la reproducción o la formación de una familia en términos tradicionales, además las personas trabajan muchísimo y a veces no tienen tiempo para una vida afectiva”, asevera.
? Algunos dicen que cuatro años; otros, que para toda la vida. ¿Tú qué crees? #14DeFebrero ⬇️https://t.co/M0Ax19VgGu
— UNAM (@UNAM_MX) February 12, 2022