Desde la mañana del sábado que ofreció conferencia de prensa, el trompetista Michael Ray ya había advertido que la Sun Ra Arkestra, fundada hace 75 años, maneja el concepto de “espera lo inesperado”.
Y así fue el espectáculo que la orquesta creada en 1950 por el jazzista estadounidense Sun Ra (Herman Sonny Blount, 1914-1993) ofreció en la explanada de la Alhóndiga de Granaditas, en su regreso al Festival Internacional Cervantino (FIC), con una tropa de quince músicos, que salieron al escenario ataviados con tocados de faraones de Egipto, vestuario dorado y ritmo, mucho, mucho ritmo.
𝐒𝐮𝐧 𝐑𝐚 𝐀𝐫𝐤𝐞𝐬𝐭𝐫𝐚 en el #53FIC
💫 Esta experiencia se vivió como una travesía sonora intergaláctica que nos invitó a abandonar el planeta y flotar entre galaxias de ritmo y color. El concierto nos condujo hacia una realidad paralela donde el tiempo se desvanecía al… pic.twitter.com/Q3XIP1ewoM
— Festival Cervantino (@cervantino) October 26, 2025
En realidad, el concierto podría resumirse en que fue un mardi gras, con tintes de Halloween galáctico.
De hecho, al final, en el magnífico encore con que cerraron su presentación, varios de los músicos de la Sun Ra Akestra bajaron del escenario y desfilaron entre el público del primer piso, tocando sus instrumentos, mientras los asistentes sacaban los celulares para retratar a la tropa de faraones ficticios.

“Ustedes no lo saben, pero Sun Ra fue una de las primeras personas abducidas por extraterrestres y él tenía muchas historias al respecto. Y nosotros estamos muy orgulloso de estar acá abajo en la Tierra por algunos momentos”, había anticipado Ray quien a pesar de su avanzada edad hizo piruetas en escena casi al final del concierto, aunque había reconocido que ya había dejado de bailar desde hacía tiempo.
Acompañado por Knoel Scott (saxofón alto barítono) y Vincent Chancey (corno francés), los tres integrantes más antiguos de la Sun Ra Arkestra, el cantante de la Sun Ra Arkestra evocó en la rueda de prensa al jazzista de Birminham, Alabama, como una figura espiritual, fanático de la egiptología, que vino a México a conocer las culturas que levantaron las pirámides, que llamaba hermanas de Egipto.

En enero de 1974, Sun Ra Arkestra fue a Ciudad de México para una estadía de tres meses y una grabación en Palacio de Bellas Artes, según publicó Hernán Muleiro en La Jornada en mayo de 2020.
Vincent Chancey tomó el micrófono en la conferencia matutina para subrayar la alienación del fundador de la Sun Ra Arkestra, cuya extensa discografía incluye álbumes icónicos como: The Futuristic Sounds of Sun Ra (1962), The Heliocentrics Works of Sun Ra (1965), Nothing is… (1966) Astro Black (1973), Space is the Place (1973) y John Cage Meets Sun Ra (1988).

“Tenemos muy presentes los conceptos de Sun Ra sobre la cuestión intergalática, su acercamiento a la vida era muy filosófico, que tenía mucho que enseñar. Él decía que fue enviado a la Tierra para educar e inspirar a la gente, enseñarles qué significa el gran Cosmos más allá de la Tierra. Nunca he conocido a nadie igual, ni nadie conocerá a alguien como él. Él decía que venía de Saturno”, apuntó Chancey.
Y así se antojaba la fusión de jazz, swing, psicodelia, improvisación y recuerdos de Egipto que el público que casi llenó la Alhóndiga de Granaditas (había más gente esperando en la calle aledaña que no pudo entrar): un espectáculo de varias especies intergalácticas, incluyendo a la cantante Tara Middleton ataviada con un ajustado vestido dorado y con una corona, que le daba un toque de virgen cristiana del espacio y que repetía los versos de “To Nature’s God” con la que abrieron: “¡Truenos! ¡Rayos! A veces deberíamos apreciar el trabajo del dios de la naturaleza”.
Mientras, como en algún video del grupo alemán Boney M, la bailarina Lauren Putty White danzaba, danzó toda la noche, como poseída, con pasos sincopados, a veces con alas faraónicas, a veces sin alas, pero igualmente volando.
Entre los asistentes al magnífico concierto que apenas duró alrededor de hora y media, estaba Damon Albarn, ex integrante de Blur y Gorillaz, quien este domingo clausura la 43 edición del Festival Internacional Cervantino (FIC), dedicado a Reino Unido y Veracruz, con su grupo Africa Express.
Así era el ambiente mientras se escucharon temas como Discipline 27b.
El saxofonista y director musical Knoel Scott recordó el legado también de Marshall Allen, de 101 años, que asumió el liderazgo de la orquesta cuando falleció Sun Ra en 1993.
Sun Ra Arkestra siente la vibra de Guanajuato
Por la mañana, Scott recordó ante periodistas que en los noventa vino con Sun Ra al Cervantino y destacó la atmósfera que se vive en Guanajuato, muy cercana a la afición de Sun Ra y el resto de los músicos por el Halloween, título de hecho de uno de los temas que tocaron: “Harlem Halloween”.
“Esta ciudad tiene unas vibraciones muy antiguas, se sienten los ancestros en el aire, es algo a lo que se sentía muy cercano Sun Ra, que era una alma vieja y un místico. Para el programa que tenemos esta noche, tenemos dos conceptos principales: por un lado, la conexión de Sun Ra con México, él compuso canciones inspiradas en México, ‘Templos mayas’, y ‘La Rosita’.
“Por otro lado, hay que recalcar que a Sun Ra le gustaba mucho el Halloween, todo esta atmósfera espiritual, esta carga que existe en los juegos entre ángeles y demonios. Y por supuesto le interesaba mucho que aquí en México se celebra el Día de los Muertos”; dijo el saxofonista del ensemble.
Así, Sun Ra Arkestra se adelantó así al tradicional Día de Muertos en Guanajuato, que ha desplazado al Cervantino en los últimos años en récords de visitantes, según testimonios recabados por Fusilerías.
